Es uno de los mayores iconos de Nueva York y no puede faltar en tu visita a la Gran Manzana. Aprovecha al máximo tu visita con nuestros consejos

Disfruta del skyline de Manhattan

Parece obvio, pero es el mayor atractivo del puente. Si puedes, ves con tranquilidad desde Manhattan, date una vuelta por dumbo y vuelve a coger el puente para deshacer tus pasos. Las vistas, y sobre todo la sensación, es increíble.

Anda sólo de Brooklyn a Manhattan

Si no quieres andar tanto, una opción es pillar el metro hasta Brooklyn y cruzar el puente hacia la isla de Manhattan. Una buena idea es aprovechar el viaje para comer en Brooklyn, y hacer el camino de vuelta tranquilamente andando.

Hazlo en bici

Hay un montón de estaciones de citibike a los dos lados, así que puedes coger una en Manhattan e ir tranquilamente hasta Brooklyn, dejar la bici, y después de dar una vuelta hacer el inverso.

Come o cena en Brooklyn

O tómate un café. Brooklyn es bastante diferente a Manhattan, aprovecha el viaje y combínalo con parte de Brooklyn. Seguro que te enamora.

Dumbo

Este es obligado. Bajo del puente, un poco al norte (entre el puente de Brooklyn y el de Manhattan) hay una playa en la que puedes disfrutar de una vistas increíbles. Aprovecha y acércate a dicha playa.

Haz un tour

La historia del Puente de Brooklyn está llena de curiosidades. ¿Qué mejor forma de descubrirlos que en el mismo puente? Hay multitud de empresas y de locales que hacen tours tanto en bici como andando. Es la mejor forma de conocerlo!

Crúzalo por la noche

Ya lo hemos dicho en más de una ocasión, Nueva York de noche es impresionante. Si puedes, cruza el puente hacia Manhattan por la noche.

Cuidado con el tiempo

El tiempo en Nueva York es muy cambiante, y tienes que tener en cuenta que vas a estar cien metros por encima de un río bastante grande, así que mira la previsión climática antes de ir. Si vas en un mes frío y hace mucho viento… quizá no lo disfrutes!